De las glorias deportivas...

Os confesaba yo el otro día que soy madridista de corazón y, casualidades de la vida, precisamente el pasado fin de semana tuve la oportunidad de conocer el estadio del equipo de mis amores. No, no fue un partido porque no había liga (y además, según mi papi, los precios se han puesto imposibles) sino una visita al Tour de Bernabéu. Resulta que hace unos meses mi papi fue a una rueda de prensa (sí, por si no lo sabíais, es periodista) al estadio y le regalaron una entrada para verlo; la ha tenido todo este tiempo guardada por si íbamos un día hasta que, por fin, antes de que llegara la renacuaja, se decidieron y nos fuimos para allá (yo, como siempre, entré gratis, je, je).

Hay que ver qué campo tan chulo; pudimos verlo desde distintos ángulos, entrar en el vestuario, sentarnos en el palco y los banquillos y hasta en la sala de prensa. Pero sobre todo, ver el museo con un montón de curiosidades sobre el Real Madrid y (casi) todos los trofeos: las ligas, las copas del rey, las intercontinentales, los torneos varios y, cómo no, las Copas de Europa… esas NUEVE copas, que se dice pronto… y que me perdonen mis amigos del Barça, Atleti, etc…

Bueno, y cambiando de tema contaros que la pequeñaja aún sigue ahí dentro (y quedan menos de diez días para salir de cuentas)… bueno, lo de pequeñaja es un decir porque por lo abultado de la tripa de mi mami ya tiene que tener unas dimensiones considerables… Aún así, estoy deseando que salga de ahí y decirle cuatro cosas a esa canija. ¡Se va a enterar!

La foto del ladito soy yo en el peasso de banquillo del Madrid (¡Si es que estamos rifando el balón! ¡¡Hay que jugar al primer toque!!) y abajo posando con las tres últimas Champions... We are the champions, my friends...