Volvamos a lo nuestro

Bueno, vamos a ver si nos centramos, dejamos de hablar de la renacuaja esta (tranquilos que os mantendré informados si hay novedades) y volvemos a mis viajes que, os recuerdo, es de lo que va este blog.
Aunque es cierto que me encanta ir a la playa y tumbarme al sol, no reniego de conocer otros hábitats, por ejemplo la nieve. Aquí me veis en una estación de esquí de Andorra (está ahí al lado pero también es el extranjero). Fui con mis papis y un par de amigos (besitos Alvarito y Vir) por cosas del trabajo de mi papi. Y eso que ellos no esquían, aunque sean muy modernos y enrollados. De hecho, en la estación de nieve, como no llevaban botas de esquí parecían dos patos mareados. Si es que les pasa como a mí que prefieren el calorcito.
Pero bueno, la verdad es que lo pasamos bien, conocimos una estación de esquí gigantesca y mis papis hasta se dieron un baño en agua calentita con la nieve cayendo sobre sus cabezas en el Caldea. El que lo pasó peor fue el UKI, que así es como llaman mis papis a nuestro coche (estos chicos es que le ponen nombre a todo). La última noche en Andorra cayó una nevada tremenda y tuvo que bajar patinando la cuesta del hotel a la carretera ¡pa habernos matao!

Aquí veis al UKI congelado, hasta con carámbanos colgándole de la matrícula