miércoles, 12 de diciembre de 2012

Doce del doce del doce...

Pues sí, hoy es 12 del 12 del 12, un día especial que dicen no se repetirá hasta dentro de casi 100 años (el 1 del 1 del 2101), que a saber dónde estará esta pequeña oveja (porque, que yo sepa, no se han hecho estudios de cuánto dura el peluche, jejeje). Pero bueno, el caso es que no podía dejar pasar la oportunidad de publicar justo hoy y dejar un poco la vaguería que tengo últimamente. Porque reconozco que tengo el blog bastante abandonado... O, mejor dicho, tenemos... mi papi y yo, porque ya sabéis que él es pieza clave en esto (él es quien escribe lo que yo le dicto, me hace las fotos, las retoca, etc, etc...).

Bueno, y si digo que tenemos abandonado el blog es porque, pensando en qué hablar, me he dado cuenta de que tengo un viaje que hice hace poco y del que no os he contado nada. Ya sabéis que en este blog os hablo de los grandes viajes que hice en el pasado (antes de que naciera la peque y antes de que la crisis nos cerrara el grifo de los viajes), pero de vez en cuando lo alterno con mis cosillas y con las escapaditas que vamos haciendo, normalmente en puentes y tal y a sitios cercanos. Pues bien, resulta que a finales de septiembre hice una de ésas, y encima de las que tienen un sitio muy conocido con el que fotografiarse (como a mí me gusta), y ni siquiera os la había mencionado.

Asi que nada, os voy a hablar de nuestra escapada a... Quizá hayáis reconocido lo que se ve a mis espaldas en la foto anterior. Os doy una pista: es el monumento más visitado de España... Sí, efectivamente, es la Alhambra de Granada, un sitio que no conocía y que le tenía ganas.

Como digo estuvimos a finales de septiembre pero tuvimos mala suerte y nos llovió bastante, lo que hizo que el viaje resultara, además de pasado por agua, un poco tristón. Aún así hay que decir que La Alhambra y Granada en general es un sitio muy chulo de visitar y muy recomendable. Eso sí, dice mi padre que ojo con el coche que aparcar es un infierno y te ponen multas sin que te enteres (pues sí, con lo bien que conduce mi papi y le llegó una multa de Granada). Ah y no os olvidéis de probar las famosas tapitas que efectivamente están muy ricas ;-)

Y nada, os dejo con otra foto mía en el que seguramente sea el sitio más conocido dentro de La Alhambra, el Patio de los leones. Y, bueno, si no pasa nada, espero publicar otro post en breve, aprovechando otra fecha que se va a cumplir y que seguramente conocéis...

Besos de peluche y feliz doce del doce del doce ;-)



4 comentarios:

Oliver dijo...

Me encanta el blog, como deseo viajar y conocer todos lugares, lo de la oveja esta genial!!
Que sigas teniendo éxito con el blog.
Saludos
Oliver

Molly dijo...

Jeje, muchas gracias por lo que me dices Oliver, aunque eso de que sigas teniendo éxitos es precioso, me temo que pocos he tenido así que ;-)
Besos de peluche y gracias de nuevo

Traveling Pics dijo...

La Alhambra! ¡Qué belleza! Me encanta cuando los juguetitos visitan lugares interesantes y/o llenos de historia!

Molly dijo...

Hola Travelling, sí, la Alhambra es muy chula. Pero no sé a qué te refieres con lo de "juguetitos"... Los de tu blog puede que lo sean, pero yo no soy ningún juguete, sino una oveja de peluche y algodón 100% ;-)
Saludetes y gracias por comentar